MEJORES DULCES ECUATORIANOS QUE YA NO EXISTEN O QUE PARCIALMENTE DESAPARECIERON

Dulces, benditos dulces…

¡Hola sobrinos amantes de los dulces, nos volvemos encontrar! ¿Cuánto tiempo ha pasado? ¿2 Meses?. Como pasa el tiempo, parece como si fuera ayer que estábamos hablando del PS1.

El otro día que estaba por la calle se me antojó algo dulce y me encontré con un vendedor de helados y compré uno, fue en ese entonces que me llegó un sentimiento de nostalgia y me decía a mismo “En mis tiempos era diferente” (Dios mío ya estoy viejo, ya digo en mis tiempos).

Pero bueno mientras disfrutaba de mi helado, me puse a recordar que existían dulces ecuatorianos que me encantaban de niño y que seguramente no soy el único que los comió, así que me puse en la misión de buscarlos (me refiero a los dulces, estoy solo pero no tanto como para andar buscando gente).

Pero me llevé la desagradable sorpresa de que dichos dulces ya no existían, ó ya no eran como yo los recordaba, y no se porque me sorprende ya que en el fondo ya sabía que si nos los había visto en mucho tiempo era por una razón.

Así es queridos sobrinos, su Tío Orange tiene 27 años…

Y como no confío en mi memoria y a veces invento situaciones me dije a mi mismo ¿Por qué no escribo un blog sobre dulces ecuatorianos que ya no existen o cambiaron a lo largo de los años? (y sí, el título dice “no existen” pero si aún los hacen o relanzaron y ya no son como yo los conocí ya no existen, además tenemos que hacer el título más atractivo, no se lee tan bien (dulces que cambiaron o que parcialmente ya no existen).

Por lo cual te traemos este blog cargado de nostalgia y de azúcar, sal y colorantes (benditos dulces).

Ahora si vamos con la verdadera introducción (y sí, lo que leíste anteriormente no era la introducción, solo era un poco del contexto de la inspiración para este blog).

¡Bienvenidos a un dulce, salado y un tanto ácido viaje al pasado! ¿Recuerdas esos bellos días en los que, con una moneda de 25 centavos para los más jóvenes y sucres en el caso de los más ancianos (del 2000 para abajo), corrías a la tienda de la esquina en busca de tu golosina favorita? Esos caramelos que se derretían en la boca, las galletas, y los chocolates que, aunque pequeños sabían a gloria.

Menos mal no soy tan viejo…

En este rincón de nostalgia, queremos revivir esos momentos y rendir homenaje a esos dulces ecuatorianos que nos llenaron de alegría (y caries) y hoy solo existen en nuestros recuerdos. Prepárate para desempolvar esas memorias de la infancia que, aunque se fueron de los estantes, jamás se irán de nuestros corazones.

Pero como diría Dross: Esto no es un top, es una recopilación de dulces ecuatorianos que ya no existen o que parcialmente ya no los encuentras en las tiendas.

Así que vamos con el primero

Las bebas (las originales): Con sabor a medicina, con forma de bebe (que daba miedo) y de colores llamativos, quien no recuerda esta bebida que a muchos nos encantaba y a veces nos enviaban en las loncheras o simplemente nos daban para que nos quedemos callados. Estas desaparecieron de las tiendas o puestos de jugos y hace un tiempo se volvieron a ver, pero ya no eran lo mismo y solo se encuentran en lugares limitados a diferencia de hace años que estaban en todos lados..

Que vas a saber tú de bebidas pelado huesitos…

Los Bonice (los originales): Largos, coloridos y con estilo, estamos hablando de los Bonice, quien no recuerda esos bolos agua con colorante de 30 cm que comprábamos a la salida del colegio y era lo más barato que podíamos invitarle a nuestra crush o los comentarios de que al graduarnos nuestro futuro era convertirnos en vendedores de estos, los cuales desaparecieron oficialmente en el país. Y sí, ya sé, que me van a decir “eres tonto Tío Orange por mi casa o mi colegio se siguen vendiendo”, pues no, si te pusieras a investigar antes de hablar te darías cuenta de que no se parecen ni en nombre y el fabricante no es el mismo.

“O metemos 30 dólares en Craft”

Los Yogoso (las originales): De la misma empresa que nos trajo “Bonice”, quién no recuerda esos bolos de yogurt que comprábamos cuando teníamos un poco más de dinero, y que nos hacían sentir que nos alimentábamos y que venían pagados entre los Bonice pues era obvio que el mismo que te vendía el Bonice era el mismo del Yogoso y no se diga de su publicidad y sabores tan buenos como el Piña-Coco o Fresa-Mora.

“Martin Scorsese Approved”

El Chicle Super Hiper Ácido: Quien no recuerda esos chicles tan ácidos que deformaban nuestros rostros y si masticabas más de 2 te dolían los dientes. Desaparecieron de las tiendas y de los puestitos que vendían dulces a la salida de las escuelas y colegios. Hoy en día se encuentran versiones pirata de este que ya no son tan buenos y ni la mitad de ácidos.

“Ni como ocultarlo”

Caramelos de Manjar de Leche: Cuadrados y más duros que pan de 5 días, estos caramelos eran lo mejor que podías comprar con 5 centavos y si tenias suerte de 2X5, sabían a gloria, aunque solo era manjar de leche cuando querías algo dulce y no tenías mucho dinero, en el país siguen existiendo varias versiones, pero las originales son las que tenían un visto rojo y letras amarillas en su logo, lastimosamente ya no existen.

Antes de que se vuelva malo…

Kinder Sorpresa (versión anterior al 2010): Solo de imaginármelo se me hace agua la boca, quien no recuerda un huevo de solo chocolate que dentro tenia una pelota en forma de yema con un juguete de mala calidad pero que estaba buenísimo, no como el de hoy en día que es mitad plástico y con un juguete de papel o que ni gracia tiene (vuelvan a los huevos kínder anteriores por Dios).

Tampico: Dios ese jugo de naranja que ni naranja tenía, sabía a gloria y su versión de mora (que a muchos no les gustaba) no se quedaba atrás. Lastimosamente ya no existe, hoy en día existen versiones piratas que tratan de competir con ese sabor único, pero ninguna se le iguala, ahora solo queda en nuestra memoria.

Popetas (las originales): De la misma empresa que nos trajo “Bonice y Yogoso” teníamos las Popetas, palomitas de maíz (canguil en ecuatoriano) con sabor a caramelo, mantequilla y limón con picante. Al ser de la misma empresa, corrió el mismo destino de sus hermanos, hoy en día existen versiones piratas que, aunque saben a los mismo ya no son lo que realmente conocimos.

Lo mismo, pero más barato…

Galletas Muecas: Galletas rellenas de crema con caras impresas y con diferentes expresiones (que en mi opinión daban miedo, más que parecer divertidas, y si el yo de 10 años “tenía” traumas) de estas tenemos poca información, según fuentes externas según se siguen vendiendo, pero en las tiendas y distribuidoras que conocemos no hay, a lo mejor vienen de otra realidad.

Me siguen perturbando…

Hay más dulces que ya no existen o parcialmente no, lo sabemos, pero esta vez abordamos los que alcanzamos a conocer, porque puede haber personas en la audiencia que tengan más de 35 años y que pudieron probar otras cosas sin embargo si nos falto algo o quieres que hablemos sobre otros dulces que recuerdas haber comido y que no estén en esta lista déjanos un comentario para sacar una segunda parte.

Con todo esto nos despedimos, esperamos que este viaje a la nostalgia te haya divertido, así como también esperamos que hayas disfrutado leer este blog tanto como nosotros al escribirlo y si te gustaría saber más de otros temas interesantes date una vuelva por nuestra sección de blogs, danos un like en nuestras publicaciones en redes sociales, eso nos ayuda a seguir trayendo contenido como este. Se despide de ustedes su Tío Orange.

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